El eco de tu adiós
Un eco que resuena, no se va ni se ausenta
Siempre serás ese adiós del que me arrepienta
La sombra que persiste eternamente
Fuiste el vuelo ligero de un ave fugaz
Un sueño dorado que quise retener
Más el tiempo implacable no deja volver
Y hoy quedo anhelando lo que ya no está
Palabras o chichas, silencios que duelen
En mi pecho se alojan como estrellas perdidas
Te fuiste sin darme cuenta, en esquinas escondidas
Y ahora el vacío crece, sin poder remediarlo
Fuimos rio que fluye y no encuentra el mar
Dos almas que se cruzan, pero no se abrazan
Caminitos divergentes que el destino traza
Y en la despedida quedó un suspiro al mirar atrás
Siempre serás ese adiós, presencia latente
Una promesa truncada en el ayer
Un abrazo no dado, un querer reticente
Un suspiro que se niega a desvanecer
Y en cada nuevo alba, un recuerdo se aviva
Un instante compartido, un amor que se siente
Aunque te hayas ido, sigues aquí presente
En el rincón del alma, donde aun guardo ese adiós
S.G - @SoniaGama65
Versos muy especiales, como la nostalgia de la ausencia que rezuma en su lectura.
ResponderEliminarUn gusto leerte.Saludos.
Gracias Agapxis encantada de tenerte por aquí.
EliminarUn abrazo