Y el cielo se desgarró sobre la tierra

Ayer

Hoy

Tristeza, profunda tristeza, todavía persiste en mí, impregnando mi ser tras el suceso de ayer. 

El firmamento se desplomó ayer sobre mi ciudad y mi corazón continúa sumido en un lodazal de emociones desgarradoras. Solo hubo daños materiales, sustos, terror, pero hoy todavía mi ánimo permanece sombrío.

El cielo nos advirtió, anunciando una tormenta de proporciones colosales. Desde lo alto, tres monstruosas células tormentosas acechaban, amenazantes. Sin embargo, aquí abajo, como siempre, ignoramos las señales de lo que estaba por venir. Los patos del río se agitaban intranquilos, incluso vi alguna rata correr despavorida. La luz del sol se eclipsó, transformando todo en oscuridad sin previo aviso.

Entonces, comenzaron a caer gotas de agua desproporcionadas, azotando el asfalto con furia y arrastrando consigo su polvo en un torrente implacable. Tras un instante de lluvia intensa, el viento llegó, trayendo consigo el granizo. Durante quince, o tal vez treinta, eternos minutos, el cielo desmoronó sobre la tierra. Las carreteras se convirtieron en furiosos ríos, las laderas del río desaparecieron y todo flotó, levitando sobre aguas oscuras y embarradas.

El nivel del agua subía sin tregua, desafiando todo límite concebido. El río cercano a mi casa amenazaba con desbordarse en cualquier instante. La incertidumbre se apoderó de nuestros corazones mientras observábamos impotentes cómo la naturaleza mostraba su fuerza más salvaje.

Cuando finalmente cesó la lluvia, el paisaje que nos rodeaba era desolador. Coches amontonados en calles convertidas en mar bravío, árboles devastados y hojas esparcidas por doquier. 

Sin embargo, el sol ha vuelto a brillar hoy, la noche ha cedido su paso a un nuevo día y nos toca enfrentar la tarea de limpiar, dando gracias por nuestra supervivencia. 

Hoy, nuevamente se esperan tormentas. Pero en nuestros corazones se mantiene la esperanza de que el cielo no se vuelva a desgarrar sobre nosotros y que la calma de la mañana se mantenga para que podamos continuar con nuestras vidas, devolviendo el orden a nuestra ciudad. 

S.G - @SoniaGama65