¡Quiero vivir!
entrando por todos los poros de la piel, uno de esos días en que a pesar de no haber dormido especialmente bien o de que la luz del sol te inunde de fuerza, sientes un vigor especial que te nace de dentro. Un sentimiento que por un momento deja a un lado tus temores y dice «sí, quiero vivir»
Vivir, sentir, soñar, acaparar momentos, acumular sonrisas, añadir bonitas imágenes de paisajes, aunque sean urbanos, incluir conversaciones desinteresadas, sumar vida a todas y cada una de las cosas que haga hoy, compartir. Respirar profundamente, cerrar los ojos y decirme a mí misma que yo soy única, que elijo mi camino hacia la felicidad, que lo que digan los demás no importa porque en mi vida yo soy la principal.
Quiero vivir, crecer, seguir aprendiendo, equivocarme y volver a intentarlo.
Porque no hay nada mejor que sentirse viva, que luchar para avanzar y pensar que, aunque en el camino me tropiece o encuentre piedras o pedruscos que intenten desvanecer mis ánimos, la vida va a continuar y por eso quiero vivir.
No hay nada más bonito que esa ansia de vivir, de sentir cada día en plenitud, de estrujar todo lo que se nos ofrece, de descubrir nuevas metas y superar las que conocemos.
ResponderEliminarPerdona veo que no se grabó la respuesta cuando te contesté. Sí las ganas de vivir son un regalo precioso que muchas veces olvidamos por nuestro día a día que nos mina la moral.
ResponderEliminarPor eso cuando nos bulle la sangre de energía hay que aprovecharla
Gracias por tu comentario